Graciela Abinader, hija del presidente dominicano, pidió interpretar la Biblia con fundamento académico y alertó sobre la ignorancia en las prédicas sin base teológica.
Graciela Abinader Arbaje, hija del presidente Luis Abinader y la primera dama Raquel Arbaje, cuestionó las prédicas religiosas sin formación teológica. En un video publicado en su cuenta de TikTok, expresó su preocupación por la forma en que muchos interpretan la palabra de Dios “sin comprenderla ni haberla estudiado”.
Otras noticias: Entre los pobres, las mujeres son aún más pobres. ¿Cómo parar esta desigualdad?
Graduada en Teología en una de las universidades más prestigiosas de Estados Unidos, Abinader afirmó que la teología combina fe y razón, y requiere una preparación rigurosa. “Muchos llamados padres o lectores de la Biblia la interpretan con una ignorancia que me resulta frustrante”, dijo, aclarando que su crítica no va contra la religión, sino contra la falta de conocimiento en su enseñanza.
Leáse también: Trump anunciará aranceles para Colombia tras recortar la ayuda financiera
La joven teóloga subrayó que, en países como Estados Unidos, los sacerdotes deben contar con un título universitario para ejercer. Según explicó, ese requisito garantiza un entendimiento profundo de los textos sagrados y evita interpretaciones erróneas que distorsionen el mensaje original.
Abinader citó el texto Divino Afflante Spiritu del papa Pío XII, que establece tres principios esenciales para comprender la Biblia: el sentido literario, que requiere identificar metáforas e hipérboles; el contexto histórico, que debe leerse desde la perspectiva de su época; y el contexto cultural, que exige entender las creencias y costumbres del tiempo en que fue escrita.
“No todo en la Biblia debe interpretarse de manera literal”, advirtió Abinader, invitando a los fieles a estudiar antes de enseñar. Concluyó que solo una lectura crítica y bien fundamentada permite vivir una fe auténtica, alejada de los discursos vacíos que confunden en lugar de orientar.
Te puede interesar: La Fiscalía presenta una acusación formal contra el expresidente de Bolivia Evo Morales por trata agravada de personas
