Un grupo de mujeres lidera la defensa de las chinampas de Ciudad de México, un sistema agrícola ancestral amenazado por el turismo, la contaminación y el abandono.
En los canales de Xochimilco, al sur de Ciudad de México, un grupo de mujeres encabeza la defensa de las chinampas, las islas de cultivo que datan de la época azteca. Entre ellas destacan Jasmín Ordóñez y Cassandra Garduño, quienes compraron y restauraron sus terrenos con el propósito de preservar un sistema agrícola que hoy está en peligro por el desarrollo urbano y la contaminación.
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Las chinampas son estructuras construidas sobre el agua para el cultivo intensivo, un modelo agrícola reconocido por la FAO como uno de los más productivos del mundo. Sin embargo, cada año disminuyen debido al turismo descontrolado, el uso de agroquímicos y la falta de relevo generacional.
“Nosotras estamos regresando a la tierra que nuestras abuelas no pudieron heredar”, dice Jasmín mientras recorre los canales. Las mujeres han tenido que abrirse paso en un entorno tradicionalmente dominado por hombres, recuperando prácticas sostenibles como el uso del lodo volcánico como fertilizante natural y la rotación de cultivos.
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Cassandra, quien colabora con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), impulsa el programa Etiqueta Chinampera, un sello ecológico que certifica a productores que no usan químicos y mantienen técnicas tradicionales. Hasta ahora, solo cuatro mujeres han obtenido esta certificación, aunque el número crece cada año.
Además, las chinampas apoyadas por la UNAM incluyen biofiltros naturales que limpian los canales y protegen al ajolote, especie emblemática y en peligro de extinción.
Las chinampas representan el último vestigio de la antigua Tenochtitlán, y su preservación es vital para el clima y el equilibrio ambiental de la capital mexicana. “Cuidar el agua es cuidar la vida”, dice Cassandra. “Porque sin agua, no hay futuro para nadie”. Estas mujeres no solo cultivan la tierra: cultivan esperanza para que el corazón verde de Ciudad de México siga latiendo.
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